La UE quiere asegurarse de que las empresas respeten los derechos humanos, protejan el planeta y sean transparentes con respecto a sus actividades.
El 25 de julio de 2024 entró en vigor la Directiva sobre la diligencia debida en materia de sostenibilidad empresarial (Directiva 2024/1760). El objetivo de esta Directiva es fomentar un comportamiento empresarial sostenible y responsable en las operaciones de las empresas y a lo largo de sus cadenas de valor globales. Las nuevas normas garantizarán que las empresas sujetas a ella identifiquen y aborden los impactos negativos de sus acciones en materia de derechos humanos y medio ambiente, tanto dentro como fuera de Europa.
Contenido de la página:
¿Cuáles son los beneficios de estas normas?
¿Cuáles son las obligaciones para las empresas?
¿A qué empresas se aplicarán las nuevas normas de la UE?
¿Cuáles son los costes estimados de las nuevas normas para las empresas?
¿Cómo se aplicarán las nuevas normas?
¿Por qué la UE necesita fomentar un comportamiento empresarial sostenible?
¿Cuáles son los próximos pasos?
Documentos
Para la ciudadanía:
Mayor protección de los derechos humanos, incluidos los derechos laborales.
Un medio ambiente más saludable para las generaciones presentes y futuras, incluida la mitigación del cambio climático.
Mayor confianza en las empresas.
Mayor transparencia para tomar decisiones informadas.
Mejor acceso a la justicia para las víctimas.
Para las empresas
Marco jurídico armonizado en la UE, que genera seguridad jurídica e igualdad de condiciones.
Mayor confianza de los clientes y compromiso de los empleados.
Mayor concienciación sobre los impactos negativos de las empresas en materia de derechos humanos y medio ambiente, y menor riesgo de responsabilidad civil.
Mejor gestión de riesgos, mayor resiliencia y mayor competitividad.
Mayor atractivo para el talento, los inversores con conciencia ambiental y las entidades de contratación pública.
Mayores incentivos para la innovación.
Mejor acceso a la financiación.
Para los países en desarrollo:
Mayor protección de los derechos humanos y el medio ambiente.
Inversión sostenible, fortalecimiento de capacidades y apoyo a las empresas de la cadena de valor.
Mejora de las prácticas relacionadas con la sostenibilidad.
Mayor adopción de estándares internacionales.
Mejora de las condiciones de vida de las personas.
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¿Cuáles son las obligaciones de las empresas?
Mejor protección de los derechos humanos y medioambientales
Esta Directiva establece la obligación de diligencia debida de las empresas. Los elementos clave de esta obligación son la identificación y la mitigación de los impactos adversos, tanto potenciales como reales, sobre los derechos humanos y el medio ambiente en las operaciones de la propia empresa, sus filiales y, en lo que respecta a sus cadenas de valor, las de sus socios comerciales. Además, la Directiva impone a las grandes empresas la obligación de adoptar e implementar, en la medida de lo posible, un plan de transición para la mitigación del cambio climático alineado con el objetivo de neutralidad climática para 2050 del Acuerdo de París, así como con los objetivos intermedios establecidos en la legislación europea sobre el clima. En febrero de 2025, la Comisión adoptó un paquete ómnibus para simplificar los requisitos de diligencia debida y así apoyar mejor las prácticas empresariales responsables.
¿A qué empresas se aplicarán las nuevas normas de la UE?
Empresas grandes
Grandes sociedades de responsabilidad limitada y sociedades colectivas de la UE:
Aproximadamente 6.000 empresas, con más de 1.000 empleados y una facturación neta superior a 450 millones de euros a nivel mundial.
Grandes empresas no pertenecientes a la UE:
Aproximadamente 900 empresas, con una facturación neta superior a 450 millones de euros en la UE.
La Directiva incluye disposiciones para facilitar el cumplimiento y limitar la carga para las empresas, tanto en su ámbito de aplicación como en la cadena de valor.
Microempresas y PYMES
Las microempresas y las PYME no están cubiertas por la normativa propuesta. Sin embargo, la Directiva prevé medidas de apoyo y protección para las PYME y las empresas de pequeña y mediana capitalización (PYME-PYME) con un máximo de 500 empresas que podrían verse afectadas indirectamente como socios comerciales en las cadenas de valor.
¿Cuáles son los costes estimados de la nueva normativa para las empresas?
Las empresas deberán asumir:
Los costes de establecer y gestionar el proceso de diligencia debida.
Costos de transición, incluidos los gastos e inversiones necesarios para adaptar las operaciones y cadenas de valor de la empresa a fin de cumplir con la obligación de debida diligencia, si fuera necesario.
¿Cómo se aplicarán las nuevas normas?
Las normas sobre diligencia debida en materia de sostenibilidad empresarial se aplicarán mediante: • Supervisión administrativa: Los Estados miembros designarán una autoridad para supervisar y hacer cumplir las normas, incluso mediante mandatos judiciales y sanciones efectivas, proporcionadas y disuasorias (en particular, multas). A nivel europeo, la Comisión creará una Red Europea de Autoridades de Supervisión que reunirá a representantes de los organismos nacionales para garantizar un enfoque coordinado.
¿Por qué la UE necesita fomentar un comportamiento empresarial sostenible?
La Directiva contribuirá a la transición justa hacia una economía sostenible, en la que las empresas desempeñan un papel fundamental.
Un amplio abanico de grupos de interés, entre los que se incluyen representantes de la sociedad civil, ciudadanos de la UE, empresas y asociaciones empresariales, han solicitado normas obligatorias de diligencia debida. El 70 % de las empresas que respondieron a la consulta pública transmitieron un mensaje claro: se necesita la acción de la UE en materia de diligencia debida en sostenibilidad empresarial.
Un tercio de las empresas reconoció la necesidad de actuar y está tomando medidas para abordar los efectos adversos de sus acciones sobre los derechos humanos o el medio ambiente, pero el progreso es lento y desigual. La creciente complejidad y la naturaleza global de las cadenas de valor dificultan que las empresas obtengan información fiable sobre las operaciones de sus socios comerciales.
La fragmentación de las normas nacionales sobre las obligaciones de diligencia debida empresarial relacionadas con la sostenibilidad ralentiza aún más la adopción de buenas prácticas. Las medidas aisladas adoptadas por algunos Estados miembros no son suficientes para ayudar a las empresas a desarrollar todo su potencial y actuar de forma sostenible.
Las normas de la UE proporcionarán un marco jurídico uniforme y garantizarán la igualdad de condiciones para las empresas en todo el mercado único de la UE. Estas normas también fomentarán la competitividad internacional, aumentarán la innovación y garantizarán la seguridad jurídica para las empresas que abordan los impactos de la sostenibilidad. La Directiva orientará a las empresas hacia un comportamiento responsable y podría convertirse en un nuevo estándar mundial en materia de diligencia debida obligatoria en materia de medio ambiente y derechos humanos.
¿Cuáles son los próximos pasos?
La propuesta ómnibus modifica la Directiva sobre diligencia debida en materia de sostenibilidad empresarial con el fin de simplificar las obligaciones y reducir la carga regulatoria, manteniendo los objetivos políticos originales. La propuesta se remite al Parlamento Europeo y al Consejo para su examen y adopción.
Los cambios entrarán en vigor una vez que los colegisladores hayan alcanzado un acuerdo y tras su publicación en el Diario Oficial de la UE. Según la propuesta, los Estados miembros deberán transponer la Directiva a su legislación nacional y comunicar los textos pertinentes a la Comisión antes del 26 de julio de 2027.
Un año después, las normas comenzarán a aplicarse al primer grupo de empresas, siguiendo un enfoque gradual (con plena aplicación el 26 de julio de 2029). Un conjunto de directrices que publicará la Comisión ayudará a las empresas a llevar a cabo la debida diligencia.
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